CUANDO LOS PERSONAJES DAN SU VERSIÓN DE LOS HECHOS
Quienes haya leído Crónica de una muerte anunciada estarán de acuerdo en usarla como ejemplo de un relato en donde todos sus componentes verbales, su estructura y la dosificación del tema narrativo son casi inmejorables.
De otro lado, el hecho de que esta novela haya tomado como punto de inicio ficcional una historia real que García Márquez recogió cuando oficiaba de periodista, le daba un toque de verosimilitud extra textual que intensificaba la valoración de esta fatídica historia en donde Santiago Násar muere cuando todos querían salvarlo y muere por un delito del que, hasta incluso d
espués de concluida la lectura, no queda clara su inocencia o culpabilidad.
Ahora bien, ¿qué pasa cuando uno de los personajes decide dar su versión de los hechos? ¡La rebelión de los personajes! Estos, cansados de ser manipulados por un dios de carne y hueso que decide su destino, se rebelan y proclaman su derecho a expresar la verdad suya y no la verdad que se acomoda a la coherencia de la historia. La locura. Locura que ya se ha intentado en varios autores y relatos, dicho sea de paso.
La nota viene al caso porque Miguel Reyes Palencia, de 83 años, el hombre que inspiró uno de los personajes de la novela mencionada, presentó esta semana el libro «La verdad cincuenta años más tarde», donde precisa los hechos que fueron contados o que fueron modificados por García Márquez.
Allí narra cómo devolvió a Margarita Chilca, porque no era virgen, cuando contrajo nupcias con él, en 1951.
Según él, sólo leyó la novela de Gabo una vez y no ocultó su sorpresa por la gran imaginación de García Márquez. Reyes Placencia explicó que, tras devolver a su casa a Margariyta Chilca, se fue a vivir a otaro lugar ya que sentía verguenza de los hechos.